martes, 28 de enero de 2014

Sólido


En definitiva, la felicidad depende de cómo establecen un sólido yo interior. No se encuentra en la apariencia externa ni en las cosas vanas. Se trata de cómo se sienten ustedes en su interior; es una profunda resonancia en su vida. Es verse colmado cada día de un sentimiento gratificante de júbilo y de propósito, una sensación de tarea cumplida y de gran plenitud; quien se siente así es feliz. Las personas que experimentan esa clase de satisfacción, aunque estén sumamente atareadas, son mucho más felices que aquellos a quienes les sobra el tiempo, pero se sienten vacíos por dentro.
Daisaku Ikeda, presidente de la SGI. 22 de enero.

*Enviado por Max Seminara, para esta nueva etapa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario